Ya no es necesario hacerlo de manera presencial. En un claro alarde de transformación digital, el pago de las multas de tráfico puede realizarse ahora a través de miDGT, la aplicación oficial de la Dirección General de Tráfico. Se trata de una ventaja que este organismo ha puesto en marcha después de lanzar la app hace cosa de un par de años.
Esta última actualización permite a los usuarios agilizar sus trámites por medio del teléfono móvil, ya sea a la hora de saldar una infracción, solicitar una cita previa, consultar notas de exámenes o emplear nuevos métodos de identificación. El plantel de funciones queda así ampliado con este cambio, que atiende y trata de dar respuesta en gran medida a las peticiones que los conductores llevan tiempo exponiendo. La idea que se persigue no es otra que la de extender a la aplicación las características que integra la página web de la DGT.
Una vez descargada, llega el turno del acceso. Aquí se plantean dos modalidades. Por un lado, está la opción de autenticarse por medio de la identidad electrónica Cl@ve, del DNI electrónico o del certificado digital, que permiten hacer un uso completo de la aplicación. Por otro lado, existe la posibilidad de acceder mediante la introducción de los datos personales, pero esto tiene la desventaja de que el sistema no ofrece todas las funcionalidades posibles.
Tras esto, se presenta la página de inicio de miDGT, donde se recoge un pequeño resumen de del perfil del usuario, en el que puede verse la misma fotografía que figura en el permiso de conducir físico, así como diferentes categorías de información relativas a los datos personales, el número de puntos disponibles, los vehículos registrados y una sección de noticias.
Desde esta interface es posible hacer uso de algunos botones que conducen directamente al contenido deseado. Así, el conductor puede acceder al carnet en sí mismo; desplegar un menú de opciones situado en la esquina superior izquierda; pulsar sobre el icono con forma de campanita, detrás del cual se esconden las notificaciones; o consultar los vehículos inscritos. A grandes rasgos, este es el escenario de navegación que se plantea, acompañado además de un diseño de apariencia sencilla y de una distribución del contenido muy intuitiva.
Otro de los atractivos de miDGT es el que podemos encontrar en la sección Pago de multas. Es en este apartado donde el usuario tiene la opción de abonar el importe de sus sanciones sin necesidad de abandonar la aplicación. El sistema empleado en la pasarela de pago cumple además con los estándares de seguridad más avanzados que existen, y es que incorpora el denominado protocolo SSL (Secure Sockets Layer) de 128 bits, encargado de encriptar los datos personales de los conductores en el momento del pago. Se trata de una tecnología cuyo uso está consolidado en aquellos entornos digitales en los que las transacciones de dinero juegan un papel fundamental, como son los bancos a través de internet y las plataformas de juegos de azar. De hecho, en la actualidad, cualquier casino movil o aplicación bancaria que se precie de proteger a sus clientes trae consigo este protocolo, cuyo trabajo consiste en cifrar los números de cuenta y las contraseñas para que los hackers no tengan acceso a ellos. En concreto, un algoritmo determinado actúa como un motor capaz de generar claves de 128 bits de extensión que sirven para escudar la información sensible. Estamos ante un recurso que también ha implantado miDGT, garantizando de este modo la integridad de los datos.
La app nos permite visualizar en el apartado de pagos un par de pestañas. En la primera de ellas se muestran las sanciones que están a la espera de ser pagadas; en la otra quedan reflejadas aquellas que ya se han pagado. No obstante, en ambos casos se presenta un pequeño historial con datos de interés, como pueden ser la fecha de la penalización, el número de expediente, la matrícula, la provincia y el importe de la denuncia. Asimismo, una de las novedades más populares es la que facilita el cambio de destinatario de la multa, siempre que fuera otra persona la que conducía el vehículo en el momento de la infracción. Para acreditar esto es imprescindible aportar el Documento Nacional de Identidad del conductor implicado.
Más allá de estas cuestiones, cabe destacar que la actual normativa puesta en vigor por la Dirección General de Tráfico establece que la presentación de estos documentos a través de la aplicación tiene la misma validez que en su formato físico. Se trata de una ventaja legal que muestra la apertura del organismo hacia la digitalización, como no podía ser de otro modo. Ahora bien, para no correr riesgos innecesarios, es recomendable llevar el carnet siempre encima por si el teléfono móvil deja de estar disponible.