Un experto en temas de seguridad, Mazin Ahmed, ha escrito en su blog que la versión de Instagram para Android tiene un fallo de seguridad por el cual nuestros datos pueden ser hackeados por cualquiera que tenga nociones básicas para ello. De hecho, afirma que no solo están expuestos nuestros datos de navegación, sino que también nuestro nombre y contraseña y las fotografías que estemos viendo de nuestros amigos.
Ahmed explica desde su blog que empezó a utilizar la app en su teléfono inteligente y a controlar el tráfico que generaba a través de una herramienta llamada WireShark, gracias a la cual se dio cuenta de que algunos de nuestros datos no se hallan encriptados en la plataforma, por lo que pueden ser filtrados fácilmente a la red. El problema radica en que la información citada al principio, en vez de transferirse por Internet con el sistema cifrado y seguro HTTPS, se mueve por el HTTP, algo que Facebook promete estar solucionando.
En cualquier caso, Ahmed se queja de que el equipo de Mark Zuckerberg ha tratado este problema como si fuese un mal menor, pues, si bien es cierto que le han asegurado que lo resolverán, también le han instado a que se lo tome “como un defecto del diseño que en futuras actualizaciones se corregirá”. Vamos, que no se les ve muy agobiados con el tema. El experto, como es lógico, ante esta respuesta muestra su preocupación por la actitud de Facebook y alerta de la posibilidad de que los gobiernos se puedan estar aprovechando de esta circunstancia.
Lo peor de todo es que ésta no es la primera vez que se demuestra que Instagram no es tan segura como parece, pues en 2013 otro experto en seguridad colgó un vídeo en el que mostraba la sencillez con la que había hackeado cuentas.
