Sea de pago o no lo cierto es que WhatsApp arrasa. Los responsables de esta app han anunciado que esta herramienta ha alcanzado la increíble cifra de 250 millones de usuarios activos en todo el mundo. Y todo ello a pesar de la polémica suscitada a raíz de que decidiesen dejar de prestar gratis su servicio e imponer un precio de 0,99 euros por su primera descarga con Apple, y una tarifa anual de 0,89 euros al renovar la licencia tras un año de uso con Android.
Cuando esta app empezó a ser de pago muchos usuarios se quejaron y amenazaron con pasarse a la ya famosa Line, ya que ésta sigue siendo completamente gratuita. De hecho, la compañía japonesa de esta app aprovechó la polémica y comenzó, al menos en España, a emitir anuncios para llamar la atención de los más despistados.
En cambio, a pesar de que Line vaya creciendo a pasos agigantados desde su salida en 2011 y por mucho que le pise los talones a su competidora, WhatsApp sigue ganando. Es más, la notablemente envidiada fidelidad de los usuarios ha conseguido que el uso de esta aplicación pase a situarse al mismo nivel que el de herramientas tan populares como Twitter, Instagram o Linkedin.
Por si esto fuera poco, el pasado doce de junio los dueños de WhatsApp anunciaron en su cuenta de Twitter que habían superado la vertiginosa cifra de 27 mil millones de mensajes enviados y recibidos en tan solo 24 horas. Casi nada. Es tal el éxito que tiene que BlackBerry se ha planteado lanzar su chat en la App Store para intentar hacerle la competencia.
Tarea que se avecina bastante difícil, ya que Line todavía no ha conseguido superarle en usuarios aun ofreciendo más servicios como la posibilidad de llamar gratis como si de Skype o Viber se tratara. ¿Cuál es la clave de su éxito? Puede que su simplicidad o tal vez el simple de hecho de que las personas somos animales de costumbres.
